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El Gobernador Henry Falcón sigue en mora con los docentes


 

La tozudez del Gobernador Henry Falcón

 

Por  Eduardo Correa

 

       Podría parecer a los ojos de cualquiera que el término “tozudez” fuese, en cierto modo,  un poco duro al aplicarlo a una persona, y más aun si esa persona ostenta un alto cargo de Gobierno, pero no, es una palabra que el vocabulario acepta libremente dependiendo de la actitud de cualquier individuo y mucho más si el aludido persiste en la condición, y tal es el caso del señor Henry Falcón y el conflicto apegado a la Constitución  que mantienen los docentes del estado Lara, en específico con los que pertenecen a la conocida Funda-Escolar, institución dependiente del organismo regional que como es harto conocido preside el susodicho. Y el adjetivo de marras le cae de perlas al referido gobernante. Y es que tozudo, como muchos deben saber, se aplica a aquel que asume una postura obstinada o testaruda, y así nos lo enseña el diccionario de la Real Academia española. Y es muy cierta la descripción que hago del larense, y debo añadir que él mismo ha faltado a la palabra empeñada años atrás cuando andaba en campaña electoral y se comprometió ante miles de docentes y personal administrativo en un acto político multitudinario, en el cual aseguró resolver el problema  que venían arrastrando los docentes y convertido en una situación invivible en lo personal y profesionalmente.

       Tal vez algunos recuerden que en un artículo anterior, hace ya algunos meses, señalé con detalles la cuestión y algo impresionado por ese despropósito adornado con demagogia espectacular por el referido.  Bien duro de cabeza debe ser aquel o aquella que gobierna y no le baste que le hagan paros legales, una y otra vez, ya agotadas todas las vías posibles del diálogo y la razón previstas en las leyes, en contratos y en la propia Constitución de la República,  que por cierto él mismo proclama defender en su prédica política habitual y que hace que uno recuerde el viejo refrán o dicho que establece “dime de que presumes y te diré de que careces”. ¿Cómo puede ser alguien tan indolente ante un reclamo popular que él mismo se comprometió en resolver y luego se deshace fácilmente del asunto? ¿Cómo puede alguien gobernar y no tomar en cuenta algo que le compete y forma parte de sus deberes? Y no es un asunto que surgió de buenas a primeras, como se dice, si no que personalmente alentó y motivó, como ya hemos dicho.

        Falcón, además de militar y abogado, ha debido ser un buen pelotero del béisbol profesional por su avidez, fuerza y rapidez de manos. Ejemplo: Cuando tiene la pelota en su campo, al cual pertenece, la lanza con velocidad al Consejo Legislativo Regional  y al ser devuelta por este del mismo modo, la toma de nuevo, se empina y lanza con tanta fuerza que la esférica va a dar al Gobierno Central. Y claro, epítetos van y vienen también: “Tú eres un irresponsable”, le espetan del órgano legislador. Y aquel responde: “Y usted también”. Y la riposta: “Usted se comió el bizcocho”. Y más rápido que inmediatamente: “Y usted también”. Y está claro que todo esto no le causa ninguna gracia a los docentes y al resto de los trabajadores que ya llevan años viendo en ´primera fila el peloteo entre unos jugadores que se van a las duchas sin batear con las bases llenas.

         Lo último que ha dicho el mandamás larense, una vez recibido el dinero enviado del Gobierno Central, quien apuesta a resolver el conflicto,  es que no le alcanza la partida “y quiere más”. Incluso llegó a decir que si paga a los maestros no quedaría para atender la parte social de los larenses, adoptando una posición sospechosa y hasta peligrosa de enfrentar pueblo contra pueblo. Mayor caradurismo, imposible. Los profesionales de la enseñanza siguen, de modo estoico, esperando la conduerma del Gobernador. ¿Se sensibilizará?

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