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"Se han vuelto una ciudadela de demonios"





“Se han vuelto una ciudadela de demonios”.

Por  Eduardo Correa


        Y dijo Dios: “La oración del hombre humilde atraviesa las nubes, expresan las Escrituras (Si 35,17), pero también perfora las mazmorras del maligno y hace añicos sus planes. Las oraciones del hombre humilde tienen doble efecto a beneficio Mío”. Lo anterior pertenece a los libros La Verdadera Vida en Dios y que tienen que ver con los mensajes celestiales que el Supremo ha decidido comunicarle a la generación de estos tiempos y que comenzaron a publicarse por instrucciones del propio Hacedor desde 1985 y cuya mensajera es la egipcia Vassula Ryden, de quien habláramos en semanas pasadas. Los textos han sido publicados en más de 30 lenguas y han recorrido el mundo de hoy llevando el mensaje de Dios, y que no se trata de nada nuevo que el Creador quiera comunicarnos ahora, pero sí de un nuevo recordatorio de las Santas Escrituras porque como el propio Ser Celestial expresa “está decidido a salvar a esta generación y colmarla de su infinita Misericordia”. Y debe añadirse que en estos textos santos el Señor despeja algunas incógnitas y describe en palabras sencillas parte del contenido de la Biblia. Y si de algo debemos estar claros, es que Dios no pretende escandalizar y crearle miedos al ser humano de fe y de creencias arraigadas, como tampoco a aquéllos que han desviado el camino y se han apartado de Dios, sino que a todos ha venido a despertarnos del sueño y de “esa especie de muerte espiritual” que padecemos y que tiene como finalidad liberarnos de las garras del pecado y del mal. Debemos alegrarnos y buscar el cobijo de la bondad infinita del Señor de los Cielos. Y ahora querernos dejarles otro de sus mensajes revelados y que van dirigidos a todos nosotros. Helo aquí.

          Jesús: -“Por Mi parte, Mis ojos consideran el mundo de hoy, nación por nación, escrutando alma tras alma en busca de un poco de calor, de un poco de generosidad y de un poco de amor. Pero poquísimos gozan de Mi favor. Muy pocos se molestan en vivir una vida santa. Y los días huyen y las horas están ahora contadas antes de la gran retribución. ¡Mis ciudades –Dios quiere decir “almas”- se han convertido en burdeles! ¡Despiadadas! ¡Se han vuelto una ciudadela de los demonios! ¡DEL TODO CORROMPIDAS desde dentro, comidas por los gusanos! ¡Un refugio para la víbora y el escorpión! ¿Cómo podré Yo no alentar sobre estos renegados Mi Fuego Purificador?”. Apunta Vassula: De repente, Jesús cambió de tono, y después de esperar unos segundos, con tono grave que me aterrorizó, dijo: -“La tierra va a temblar y estremecerse. ¡Y todo el mal edificado en Torres –como la torre de Babel- se derrumbará en un montón de escombros y será enterrado en el polvo del pecado! Arriba, los Cielos se moverán y los cimientos de la tierra se sacudirán”.


“Reza para que la Mano del Padre no caiga en invierno. Las islas, el mar y los continentes serán visitados por Mí inesperadamente, por el estruendo y la llama. Escuchad atentamente Mis últimas palabras de aviso, escuchad ahora que todavía hay tiempo. Leed Nuestros Mensajes –los de Jesús y María, los dos testigos- y dejad de estar despreciativos o sordos cuando habla el Cielo. Bajad vuestras voces y oíd las Nuestras. Reflexionad dos veces antes de juzgar; pensad más de dos veces antes de condenar las Obras del Espíritu Santo. Yo no perdonaré a ninguno que se mofe del Espíritu Santo, blasfemándolo abiertamente. La Justicia los precipitará al infierno. ¡Levantad todos vuestros ojos y escudriñad los Cielos para contemplar Mi Santa Faz! ¡Levantad vuestros ojos hacia el Cielo y no pereceréis. ¡Arrepentíos! Y pedid al Padre que se apiade. Pronto, muy pronto ahora, los Cielos se abrirán y Yo os haré ver. El Juez”.

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