Desprendimiento
Por
Eduardo Correa
Quien recuerda la comida
y las cosas que haya dado
seguro lo visita el diablo
y le atormenta la vida,
porque es una Ley Divina
refrendada por el Cielo
llevarle siempre consuelo
a todo aquel que haya caído.
Dar la mano al afligido
al inocente y al pobre
y a todo aquel que llore
sin hogar y sin cobijo,
llevar la sonrisa al niño
que camina por la calle
y no causarle desaire
al anciano y al mendigo.
Demostrar siempre cariño
y llenar de sentimiento
a los padres y al maestro
al amigo y al vecino,
caminar con mucho tino
con valor y con coraje
llevando siempre el mensaje
de nuestro Padre Divino.
Comentarios
Publicar un comentario